domingo, 22 de mayo de 2016

HALF PAMPLONA 2016: 5h04min

De este último Half podría contar miles de anécdotas con mis compañeros espartanos, y lo bien que me lo he pasado durante todo el fin de semana, pero me centraré sólo en la carrera. A modo de resumen de esta convivencia: "Pero que bien me lo he pasado".
La verdad es que el finde no empezó bien, acumulaba unos mocos verdes asquerosos que no me dejaban respirar durante toda la semana y para colmo el viernes tuve una cagalera bastante significativa con lo que no se auguraba lo mejor para la prueba, pero ya sabeis como va esto, estás allí y al final sales sí o sí, por lo menos a ver que pasa.
Este año lo hicimos muy bien, comimos muy pronto en casa y para las 12h ya estabamos en el pantano, y mejor aún, bien aparcados para dejar el coche allí toda la noche. Check-in, dejar mochilas y para cuando nos quisimos dar cuenta ya estabamos en la rampa del pantalán.
Este año la natación tenía novedades. La primera gran novedad es que era a una única vuelta, para mi un acierto para no matarnos a leches en el agua. La segunda es que había cajones de salida, tú te colocabas en la zona de tiempo en la que presumiblemente ibas a nadar e ibas saliendo, de tal forma que había una alfombra justo en la entrada del agua que era la que realmente te marcaba el tiempo. Para mí, fue un gran acierto de la organización. Una organización que mejora año a año.
Aitor y yo nos colocamos en 30-35', quizás era muy pretencioso para mí, porque creía que iba a nadar en 37-38' y pensé que mejor aguantar al principio y que luego te fuesen cogiendo los de atrás. Bocinazo y para el agua. En principio me fui muy a la izquierda para evitar golpes y la idea era ir cerrándome cuando se abriera un poco el grupo, pero calculé mal y en esa parte hice más metros de los previstos y perdí bastantes posiciones, aún así sabía que estaba nadando bien. Al llegar a la boya girabamos y afrontabamos el largo de mayor distancia, la verdad es que yo no ví la boya de giro y me guié por la gente y los pies de los que llevaba delante, comiendome muchos golpes pero avanzando mucho. La verdad es que era una sensación un poco extraña, porque yo no suelo ir en un grupo tan numeroso y me comí muchos golpes. Giré en la boya y a por la tercera, y ahí es donde empezó un poco el calvario. El agua empezó a agitarse y se formaron olas y bebí más agua de la prevista, menos mal que es dulce porque algún trago fue bastante mayor de lo normal. Además levanté la cabeza bastantes veces perdiendo mucho tiempo.
En este último largo, apenas tuve referencias, sólo me fije que la corriente nos estaba llevando hacia la isla, y que no podiamos hacer nada. Cuando finalmente empece a atisbar el pantalán de salida, era cuando peor estaba nadando, así que me limité a llegar pensando que otra vez se me había ido el tiempo en la natación en Alloz. Salgo del agua y paro el reloj 35:26, buah, IMPRESIONANTE, ni en mis mejores sueños, y lo mejor de todo, que sé que puedo nadar aún mejor.
En ese momento me acordé de mi compañero Aitor. Pocos saben lo que se lo ha currado el pistolero este invierno con esta humilde tortuga para poder pegarle este mordisco de 7 minutos al crono en el agua. Gracias Aitor.
Y me vine arriba y subí la larga rampa como si no hubiese un mañana y se acabase ahí la carrera
Y ahí estaban todos mis fans, Puy, Ines, Mar, Sonia, Meu, Javi, los ví a todos, y me vine arriba, por fin me había salido una buena natación, tenía hay el sub5h, seguía soñando.
Tardé mucho en quitarme el neopreno, tenía las manos bastante frías de la natación y le costó salir, pero salió. Opté por quitarme el tritraje y ponerme uno seco, gran decisión, y salí como loco a por la bici.
Comienzo la bici, y paso a gente, pero me doy cuenta que no estoy tan atrás como otras veces y cuesta pasar a la gente. Bajo tranquilo Alloz, y de pronto Pablo llega hasta mi vera, me saluda y me dice: "ahora ya te puedes ir", llego al cruce de la general y no están mis fans ciraucarras, en el repecho de Lorca me pasa Chano y me dice que le siga, como si fuese tan fácil. Llego a Villatuerta y sé que aquí va a pegar el viento a favor hasta Larraga, como el año pasado. Aquí hay que regular que luego viene lo malo, además llevo la cabra y en teoría voy a ir más rápido. En este tramo el 50 de la cabra se me quedo un poco corto, pero bueno, no pasa nada,la idea era llegar en 52 minutos a Larraga, y llegue en 52 minutos clavados, y sin gastar un gramo de fuerza de más, bravísimo. Noto los mocos un poco, pero voy bien

Llega el giro, sé que aquí empieza el peor tramo, efectivamente viento en contra, pero menos del esperado, puedo mantenerme a 27-28km/h sin problema, bien bien, es más, el tramo hasta Mendigorria se me hace hasta corto y todo. Voy dirección Puente y me pasa Edu de Triflavi, flipo un poco porque creía que iba delante, pero bueno, mejor, una referencia, a ver si aguanto hasta el puerto con él. Llego a Puente y me acuerdo de Joseba, ahí el año pasado me acordé de él y lloré como un niño, y ahora voy en tiempo, el sub5h ese que le quería brindar el año pasado está cerca.
Comienzo el puerto y Edu se me va, pero voy bien, hay que regular que luego ya no hay viento. Le veo al fondo, se me va a ir bajando pero no me importa. Bajo sin arriesgar un milimetro, muy parado, y en cuanto llegue abajo a volar. Iré 2-3 minutos mejor que el año pasado en el tiempo sólo de la bici, si aprieto en el llano, me bajo con 5 minutos.
Pero en 5 kms, las ilusiones se tornan en pesadilla, es lo que tiene la larga distancia. Llego al llano, y el viento que en teoría no iba a pegar, pega muchisimo de cara, te hace ir casi parado, se me está yendo el tiempo aquí y lo sé. Para colmo, en uno de los inumerables repechos hace amago de subirse el isquio de la pierna derecha, bueno chavalote, pues a sufrir y a intentar perder el menor tiempo posible. Me pego con el viento hasta Ororbia pero sin ir al 100% porque tengo miedo a que se suba el isquio. Pillo un bache y a tomar por el saco el cuentakilometros, me quedo sin referencias, perfecto, se tuerce todo.
Giro en Ororbia, el viento da de lado, y aprieto hasta lo que pueda. Los repechos no doy todo de mí porque sé que voy tocado, y bajo hacia Landaben perdiendo los diferentes grupos que podrían ser el mio, que pena.
Llego a Landaben y en un repechín, intento apretar y se me suben los dos psoas, no horror, me tengo que parar. Que rabia. Estoy en el km 80, me quedan 5 kms para Pamplona, voy en tiempo, pero mi cuerpo ha dicho basta. Jo, con la buena natación que había hecho. Y entonces me acorde de Manolo, y pensé, leches, no te puedes rendir aquí, que hay mucha gente en Pamplona esperándote, por lo menos llega a la transición y a ver que pasa. Y me monto otra vez en la bici, pero yendo muy muy despacio, a 20km/h, pero hay que llegar. Paso el puente de San Jorge y estoy llegando ya por la alameda a Santo Domingo, a ver si no se me sube nada ahí.
Y en ese momento llego la sorpresa del día, me pasó Pablo Martin Sarobe como un avión, y tuve una doble sensación de rabia y orgullo. Rabia porque yo debería ir mucho más adelante, y orgullo, porque sabía que le estaba saliendo una carrera impresionante a mi compañero, y me alegro por él.
Llego a la transición, sorprendente, pero aún estoy en tiempo de sub5h, si, que ya sé que es una locura y que se me va subiendo todo, pero hay que intentarlo, que pocas veces pasa esta oportunidad. Me cambio rápido y salgo a correr. Nada mas salir pienso que si no se me hubiese subido nada en bici, hubiese bajado 3-4 minutos y entonces si que tendría facil el sub5h, jo que pena, me dan ganas de llorar de rabia. En la esquina de siempre veo a Puy, Ines y Sonia, bajo el Labrit y veo el baño. Paro, esa era mi táctica, parar a mear nada mas empezar a correr, bien, 1 minuto perdería ahí. Subo a la muralla y le veo a Javi que me anima, le digo lo que pasa, y me sigue animando.
Corro hacia Aranzadi, me da miedo la bajada porque ahí se me puede subir todo, y lo intenta pero no lo logra. Y el mejor fotografo me hace otro de esos fotones de enmarcar

Sigo corriendo, en el giro veo a Oli, va muy bien, tiene el sub5h a tiro, y veo a Pablo, que también va bien. Llego a Santo Domingo y vuelvo a ver a Javi, que me anima, en las subidas si que lo estoy pasando mal, y el problema es que lo estoy pasando mal porque se me sube el isquio, no por la cuesta.
Llego a la primera vuelta 30:35, ostras, aun parandome y con los problemas de isquios, apretando un poco podría estar en tiempo, bien, bien, a por Pablo, hay que ir recortándole, pero veo que no voy. Se lo digo a mis espartanas, Sonia me dice que no mire el tiempo, y sigo. Voy cogiendo gominolas y coca cola en los avituallamientos, pero no voy como es habitual, voy a 158-160 pulsaciones y apenas recorto. Casi llegando al giro veo al pistolero que me grita sub5h, a por él. Oli va perdiendo tiempo con el asma, pero lo puede lograr y Pablo va a buen ritmo. Cruzo Aranzadi, veo de fondo al pistolero y le voy a pillar en Santo Domingo, lo veo y le grito PISTOLEROOOOOOOO, creo que alguno todavía alucina. Le cojo en la entrada de Estafeta, fotón, que grande compartir unos metros con Aitor, que ha hecho que nadara tan bien. Le choco y me voy hacia delante, está corriendo muy bien, lo está disfrutando.
Pico la segunda vuelta 32:14, buf, no, ya veía yo que no, se me ha ido el tiempo. Echo un cálculo rápido y debo correr en 28minutos la última vuelta, ni loco, y me dedico a disfrutar. Ojala lo logren mis dos compañeros que van por delante, porque al fin y al cabo esta es la grandeza de este equipo, que pensamos por el compañero, y no por nosotros mismos.
Última vuelta, me acuerdo de gente que el año pasado también estaba en mis recuerdos en esa última vuelta y cae una pequeña lagrimita, correr en Pamplona es especial, siempre es especial.
Llego a la subida a la muralla y veo a Sarobe, le pillo, lo veo, le pillo, y entonces me acuerdo de Luis Lopez y como hice esa última vuelta con él el año pasado, y veo que la puedo hacer con Pablo. Bajo con Pablo la muralla y me planteo hacer la vuelta con él, pero me dice: "Juanillo, tira, voy bien, si aprietas tienes el sub5". Tiro un poco hacia delante pero dudo, me paro y le espero. Corro con él 500 m pero ya veo que yo voy casi parado, me aseguro de que va bien y tiro hacia delante. Veo a Oli al fondo, ostras le puedo pillar y me he bajado 10 minutos más tarde a correr.
Voy a pasar a Joseba Urruti, grande Joseba, en una situación personal complicada para él brindando esta victoria psicologica a aita, que grande Urruti, le toco y le animo. Giro, choco la mano con Pablo, ya solo que da gastar las últimas fuerzas en Aranzadi y disfrutar Estafeta. Voy al límite, muy muy al límite, hacía bastante tiempo que no iba tan vacío de fuerzas, igual hasta peor que en Valencia. Llego al avituallamiento, echo un sorbo de coca cola y a por Santo Domingo. Giro Santo Domingo y se marcan las 5h de carrera. Se acabo el sueño, no pasa nada, ahora si que si a disfrutar.
Veo a Ovejita sacando fotos y le saludo. Llego a la zona de público y choco las manos a todo el que me lo ofrece, les aplaudo, es mi pequeño homenaje, en Pamplona el público y los voluntarios se vuelcan y siempre es bonito darles un pequeño homenaje. Veo a Oli al fondo, que pena, no lo ha conseguido, no ha bajado tampoco de 5h, me da rabia. No sé si le hubiese cogido esprintando, pero no lo quiero hacer, quiero disfrutar. Aplaudo al público en el Ayuntamiento y Estafeta y me mojo un poco de ese sentimiento pamplonica de correr por esas calles, sigo aplaudiendo al público y veo a Puy, Ines y Mar sacando fotos y animando como locas. Que grandes sois.
Plaza del Castillo, 5h03 largos, para meta, al final 5h04, llego, exhausto paro un minuto y me colocan el pañuelico, seguido a la zona de recuperación, me siento y comento la carrera con mis compañeros. Llega Pablo, carrerón, que grande, sólo por ver su cara de felicidad ha merecido la pena sufrir tanto
El post carrera ya fue otro cantar, ahí si que no nos gano nadie.
¿Con que sensación me quedo?. Con que la cague en la bici, que precisamente es lo que mejor se me da, pero es lo que hay. ¿Que igual hubiese hecho sub5h sin cagalera y mocos el dia anterior, ni viento?. Pues si, probablemente, pero esta vida es el aquí y el ahora, y me quedo con que lo dí todo, mucho más incluso que el año pasado, y eso es lo importante.
Y señores, esto no para, y la siguiente parada es hacer de liebre en la maratón de Laredo, asi que no hay tiempo para pensar, solo hay tiempo para seguir hacia delante
Pero volveremos a Pamplona, porque correr en Pamplona sigue siendo diferente, y porque hoy mas que nunca está vigente el lema de Pablo: "Pero que bien lo hemos pasado"