Odió la lluvia. Los que me conocéis sabéis que no me gusta en absoluto la lluvia, y además siempre que veo que llueve, no salgo a entrenar, otra cosa es que la lluvia me pille a medio camino.
Y sin embargo, a pesar de qué haya sido un invierno lluvioso, llegan las primeras carreras del año y ando, y muchos os preguntaréis cual es el secreto.
Pues el secreto es muy sencillo, es el secreto de los puentes, por ejemplo en mi caso es el secreto del Puente de Euskalduna
Para los que no conocéis Bilbao, el puente de Euskalduna es un puente cubierto de aproximadamente 600 m de longitud. En 6 minutos corriendo desde mi casa estoy allí, y después los días de lluvia ya sabéis lo que toca, puente arriba, puente abajo, se puede hacer trote series, o lo que haga falta, todo con tal de no mojarme. Ya se que es un poco de locos, pero es la única forma de entreno en invierno evitando resfriados en el norte.
Otro día os cuento el secreto de la bici cuando llueve.
No hay comentarios:
Publicar un comentario