Hoy vamos a hablar de los picos de forma, porque aunque algunos piensen que hay que estar todo el año a tope, esto en realidad no es así. Es mucho mejor estar regular en ciertas pruebas para luego poder darlo todo el dia D y la hora H
Normalmente cuando competía del 2007 al 2010, mis temporadas tenían 3 picos de forma, 3 de esos momentos en los que hay que estar a tope, solían ser Abril, Junio y Septiembre.
Este año, sin embargo, y después de un invierno en el que apenas he parado, habrá sólo 2 picos de forma. Uno ahora en Abril (coincidiendo con el Campeonato de España de Aviles), y otro a final de Junio (coincidiendo con la San Fermín Marathon).
Este año, aunque en principio se planteaba como de transición y a ver que pasa tras varios años sin correr, la verdad es que está saliendo un año bastante bueno, y estoy rindiendo a un nivel que ni yo mismo me esperaba. Sé que mi temporada se centra en los duatlones, puesto que en los triatlones no tengo nada que hacer al ser un pato en el agua, y lo estoy haciendo bien. Veo que mi primer pico de forma funciona.
Ya sólo quedan 2 semanas y media para Avilés, y sé que si freno un poquito ahora voy a llegar a tope allí, porque estoy progresando en cada carrera, y logrando mejores parciales, es lo que tiene conocer perfectamente a tu cuerpo, que sabes cuando parar y cuando apretar.
Esta semana ha sido bastante dura en cuanto a entrenamientos de carrera a pie, sin apenas tiempo, pero dándolo todo en cada entrenamiento, menos mal que las dos siguientes ya son de parón activo.
Mi primer pico de forma parece que ha funcionado, veremos que ocurre con el segundo, pero eso es otra historia, de momento me conformo con vivir el presente, disfrutar del camino en el entreno del día a día.
De momento me conformo con soñar en lograr un buen puesto en Avilés con mis compañeros espartanos.
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